“El futuro de la industria argentina es trabajar con tecnología 5G”
Así lo definió el Dr. Ing. Rubén Fusario, graduado de la Facultad y especialista en el área de redes y sistemas.
La tecnología 5G es un vehículo de alta capacidad y velocidad en redes. Es lo que se necesita para que las redes sean más eficaces y eficientes: alta velocidad, baja latencia y alta concentración de dispositivos. El Dr. Ruben Fusario, Ing. Electrónico de la Universidad Tecnológica Nacional Facultad Regional Buenos Aires, profesor titular de la UTN y la UBA y autor de numerosos libros sobre comunicaciones, redes teleinformáticas y teoría de control, dio su definición sobre la tecnología 5G, sus usos y características principales; ventajas y desventajas; la importancia para el desarrollo de la industria nacional y la incertidumbre sobre su implementación en Argentina.
“La tecnología 5G, quinta generación en redes móviles, se destaca por incorporar innovaciones técnicas y operativas significativas respecto a la tecnología actual 4G. En lo concerniente a las prestaciones de acceso a la red de Internet, tienen que ver con el incremento notable de la velocidad de transmisión de datos, reducción de la latencia (demora en la transmisión de datos desde la fuente al receptor final) y aumento de la cantidad de dispositivos conectados simultáneamente a la red. 5G constituye, sin lugar a dudas, la tecnología emergente más importante en el campo de las comunicaciones por internet sin cable”, definió el Dr. Fusario.
En cuanto a la velocidad de carga y descarga de información, la tecnología 5G es 20 veces más rápida que la 4G, dado que tiene una velocidad de descarga máxima de 20 Gbps, mientras que la red 4G tiene 1 Gbps.
En las redes 4G la latencia es de 30 a 50 milisegundos, mientras que en 5G oscila entre uno y tres milisegundos, lo que permite que se pueda enviar y recibir gran cantidad de datos casi de manera instantánea. Por ejemplo, permite descargar una película completa en alta definición en pocos segundos: “esta característica es relevante para las aplicaciones en tiempo real, como es el caso de una cirugía remota donde el cirujano puede controlar al robot que ejecuta la operación a miles de kilómetros de distancia en tiempo real”, sostuvo el ingeniero.
Además la tecnología 5G, explicó el experto, ofrece una conexión más estable por tener baja interferencia e incrementa significativamente el número de dispositivos conectados en forma simultánea a una antena, respecto a la tecnología 4G: “en teoría podría soportar, por kilómetro cuadrado, aproximadamente más de un millón de dispositivos conectados al mismo tiempo”.
Según un informe de la Global Mobile Suppliers AssociationGSMA), para 2025 las redes 5G contarán con más de 1.700 millones de suscriptores en el mundo.
Pero a pesar de las ventajas operativas de la tecnología 5G, el Dr. Fusario remarcó limitaciones determinantes para su implementación como la necesidad de inversiones millonarias y la provisión y despliegue que requiere su infraestructura básica, no sólo por el equipamiento de las antenas, sino porque al operar en la banda milimétrica el área de cobertura de cada antena es menor que en las tecnologías anteriores (4G y 3G) y por lo tanto se deben instalar más antenas por unidad de superficie para alcanzar la misma cobertura geográfica.
“Se estima que se necesitará una inversión entre 30 y 50 % superior a la que se emplea para desplegar la tecnología 4G. Por otro lado, la tecnología 5G consume entre dos y tres veces más energía que la 4G y además el costo de mantenimiento es superior al de las tecnologías 3G y 4G. Es por ello que la implementación de esta tecnología se experimenta fundamentalmente en países donde está vigente la economía de mercado, existen marcos institucionales estables, respeto por la libertad y la propiedad privada”, expresó.
Su utilización es significativa no solo para los usuarios a nivel doméstico, sino para las industrias. Según explicó el Dr. Fusario, “con Internet de las cosas, cualquier dispositivo que tenga una placa de red y se comunique, hoy tiene una limitación. Es que Internet que tenemos hoy no trabaja con estas redes de alta velocidad, la velocidad es más lenta, trabaja con IP versión 4 en su mayoría, y esto hace que la propagación de los datagramas -que son los paquetes que se transitan en Internet-, tengan dificultad para alguna transmisión rápida, eficiente y con baja latencia”.
El ingeniero aclaró que pese a que “el futuro es trabajar con 5G y con IP versión 6”, en Argentina no están dadas las condiciones para implementarla porque “las empresas no se van a jugar en implementar la tecnología cuando saben que no pueden recuperar el capital. Tener 5G implica estar en la frontera del conocimiento y del avance tecnológico de las industrias. Con 5G, IP versión 6, e Internet 2, lo que va a ocurrir es que los países y las empresas que tengan esa tecnología van a estar a la vanguardia y no se va a poder competir contra ellos”.
En este escenario, el Dr. Fusario sostuvo que esta tecnología se va a implementar en los países centrales, “ya se está implementado en países como Alemania, EEUU y China”.
Para concluir, el Dr. Ruben Fusario reflexionó sobre la tecnología 5G y el escenario que se presenta en nuestro país: “Argentina sin la tecnología 5G, alejará a las empresas de los avances tecnológicos que se generen en las diferentes actividades productivas de bienes y servicios. De esta forma perderán competitividad, mercados y experimentarán atraso tecnológico en comparación con empresas similares que desarrollen sus actividades en países con la tecnología 5G”.