“Buenas noches a todos, señor decano, estimado ingeniero Guillermo Oliveto, señor vice-decano, señores directores de cátedra, quienes seguramente han desarrollado su carrera dentro de esta universidad, señores docentes, estimados docentes, padres y amigos de los egresados, personal no docente, y los principales destinatarios, orgullosamente ingenieros tecnológicos.
Han transcurrido al menos cinco años y encuentro muchas coincidencias con el número 5, por eso inicio precisamente con la duración de los cursos para graduarse. Durante este período, los componentes clave del logro obtenido, en orden de prioridad, incluyen los valores familiares. El tema de regresar a casa a altas horas de la noche y encontrar un plato de comida, así como el apoyo de sus seres queridos ante desafíos académicos difíciles, han sido fundamentales. Afortunadamente, desempeñaron un papel crucial.
En segundo lugar, el acceso público y gratuito a la educación universitaria. ¿Qué valor tiene haber tenido una universidad pública, gratuita y laica donde hemos podido formarnos? Es un valor que no debemos perder y que debemos fortalecer en los tiempos actuales.
La calidad de esta institución educativa, como mencionó el ingeniero Guillermo Oliveto, se refleja en su frecuente acceso al Premio Nacional de la Calidad. Durante nuestros años de estudio, estábamos muy lejos de esto, pero lo hemos logrado.
El apoyo del cuerpo docente merece también un reconocimiento especial. Nuestros profesores no llegan en autos lujosos ni con relojes de oro, sino que dedican su tiempo y vocación para brindarnos lo mejor, exigiéndonos y ayudándonos a crecer.
Y lo más importante, su dedicación y esfuerzo. ¿Cuántos de ustedes han debido asistir a clases los sábados, acostarse temprano los domingos para estudiar, mientras muchos también trabajaban? Esta universidad ofrece la flexibilidad de tres turnos y una variedad de carreras, incluida la única Ingeniería Textil del país, con una destacada calidad de profesores a lo largo del tiempo.
También recordarán cinco eventos significativos de por vida. Primero, el nacimiento de un hijo, una bendición incomparable. Segundo, el día de aprobar la última materia, liberándose finalmente para celebrar en la calle Medrano. Tercero, hoy, el día de recibir el título. Cuarto, el día de completar con éxito una obra clave. Quinto, el día en que el cliente aprueba un proyecto sin observaciones, resultado de horas de dedicación y adaptación a normas rigurosas.
Finalmente, hay cinco responsabilidades principales que aplicarán con lo aprendido. Primero, la honestidad en sus actos, esencial para cualquier ingeniero. Segundo, la resistencia de los materiales, vital en cada prueba. Tercero, la equidad, buscando siempre el win-win en negociaciones. Cuarto, la justicia, siendo responsables ante cualquier situación. Quinto, la empatía, esencial para comprender y apoyar a quienes trabajan con ustedes.
Muchachos, les espera una vida y carrera maravillosa. No se equivocaron al elegir la Universidad Tecnológica Nacional para sus estudios. Con el mayor respeto por todas las universidades de ingeniería en nuestro país, la UTN es especial y lo recordarán toda la vida.
¡Sean bendecidos y disfruten esta maravillosa profesión! ¡Viva la enseñanza pública y gratuita en nuestro país! ¡Viva la Universidad Tecnológica Nacional!”