Docente de la UTN Buenos Aires fue premiado por el diseño de una embarcación

El Ing. Martín D’Elía, graduado y docente de Diseño Naval Asistido, Embarcaciones Deportivas y Embarcaciones Veloces de la carrera de Ingeniería Naval de la UTNBA, obtuvo el Sello del Buen Diseño argentino otorgado por el Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación, por la embarcación deportiva Canestrari 280 Crossover.

“Este modelo lo desarrollamos a partir del año pasado y llevó un proceso de diseño por computadora en 3D. Efectuamos toda la diagramación, la ergonomía, se hacen partes pequeñas del barco a escala para ver cómo resultan los espacios, los lugares que tiene la embarcación. Y una vez definido el diseño, se encara el desarrollo de las matricerías para realizar la construcción. Estos barcos están hechos en plástico y llevan todo un diseño de matricerías”, explicó el Ing. D’Elía.

El Ing. D’Elía se desempeña como Director de Ingeniería en el astillero Canestrari, y desarrolló el diseño con el apoyo de Daniel Canestrari, quien “aportó muchas ideas y particularidades sobre la característica del diseño”.

Una de las características del diseño, destacadas por el jurado, fue el uso de software de última generación en diseño, especializado en arquitectura naval, con el que a partir de un modelado 3D se construyeron las matrices a través de un sistema de fresado a gran escala.

El Profesor D’Elía aseguró que esas tecnologías son, además, las que utilizan sus alumnos en la Facultad: “en Diseño Naval Asistido vemos el diseño de cascos y todo lo que son los cálculos de arquitectura naval, a través del diseño en software 3D. Y en otra materia que doy en sexto año, que es ‘Proyecto de Embarcaciones Deportivas’, es donde hacemos proyectos de este tipo de barcos donde generalmente los alumnos desarrollan con herramientas como puede ser solidwork u otras que uno tiene, para hacer bocetos y diseños 3D de barcos deportivos”.

“Los alumnos ven diseño tridimensional y, sobre todo una particularidad que tienen este tipo de embarcaciones, que es la ergonomía, el espacio interior para que uno pueda tener comodidad a bordo. En espacio chiquito uno tiene que aprovechar al máximo los huecos que genera para poder tener una mejor habitabilidad a bordo”, explicó el Ing. D’Elía.

El graduado y docente de la Facultad consideró, además, que el premio es muy importante también para que sus alumnos puedan “valorar con esto los nuevos contenidos que se incorporaron a la carrera con el nuevo plan de estudios en la UTN, y que hacen un diferencial con respecto a otras universidades. Hacen que el día de mañana puedan desarrollarse con más conocimientos en este campo, que año tras año requieren más tecnificación. En ese sentido la UTN marca un poco la diferencia”.

El Diseño

La embarcación ganadora tiene 8,60 mts de eslora y 2,60 mts de manga, con un calado aproximado de 0.65 mts. (Sección Media con motor y combustible) y 0.80 mts. (Sección Media a Plena Carga) y capacidad para 8 personas; el motor tiene una potncia de 350 Hp y una velocidad máxima estimada en 35 nudos con carga máxima o 40 nudos con carga mínima.

“Creo que lo que hizo que mi diseño ganara el sello del buen diseño fue el uso de nuevas tecnologías en el diseño 3D de embarcaciones, que es algo que no es muy habitual. Esa fue una mirada muy interesante. Y por otro lado, el diseño en sí. Porque es muy actual, con un concepto totalmente distinto al de las clásicas embarcaciones que uno está acostumbrado. Es una embarcación grande, de porte medio, que tiene determinadas características como una proa abierta, algo que no es común, donde se puede poner una mesa en la que seis personas se pueden sentar cómodamente”, detalló D’Elía.

“Y, además, –continuó– sigue teniendo una habitabilidad interior de cabina, de baño, de camarote, lo cual hace que se pueda aprovechar mucho más la cubierta, toda la superficie. Generalmente en los barcos tradicionales la proa se pierde porque es cerrada en la parte delantera, entonces es un lugar que no se usa. En este caso lo hicimos todo abierto, con un pasillo por un costado, lo cual también es algo novedoso. Por primera vez nos arriesgamos a hacer una embarcación asimétrica, que tiene un pasillo por un costado y por el otro no, con lo cual rompemos el esquema tradicional de que el barco tiene que ser simétrico.  Eso se sumó a que en época de pandemia nosotros hicimos mucho hincapié en el uso del espacio al aire libre”.

La Distinción

El Sello de Buen Diseño argentino es una distinción que otorga el Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación a los productos de industria nacional que se destacan por su innovación, por su apuesta a la producción local, por su posicionamiento en el mercado y por su calidad de diseño.

La distinción se otorga a cinco categorías: productos para la industria y transporte; equipamiento; productos para el hogar, la oficina y recreación; indumentaria, calzado y accesorios; y comunicación estratégica.