Informe de Decano de la 3era reunión de Consejo Directivo de la UTN Buenos Aires
El pasado miércoles 8 de junio se llevó a cabo la tercera reunión ordinaria de Consejo Directivo.
El pasado miércoles 8 de junio se llevó a cabo la tercera reunión ordinaria de Consejo Directivo. A continuación reproducimos el informe de Decano:
Tres cosas, solamente. Una cuestión motivo de orgullo, felicitar a la gente de Posgrado y Vínculo con la Investigación; acreditamos tres carreras nuevas, la Especialización y la Maestría en Ingeniería Ambiental, con categoría A. Se acreditó también la Maestría en Alimentos, con muy buena evaluación y algún compromiso de mejora. Se acreditó la Especialización y la Maestría en Ingeniería en Sistemas con categoría B (la categoría A es excelente, la categoría B es Muy buena). En ambos casos es importante. Porque hasta ahora los procesos de acreditación, tanto de grado como de posgrado, pero en posgrado en particular, porque siempre generan alguna inquietud, tanto en doctorado como en maestría han sido exitosos. Eso tiene mucho que ver no solo con la Subsecretaria, sino también con el equipo de trabajo y con la calidad de los docentes que integran las diferentes especializaciones y maestrías.
La otra cuestión, auspiciosa también, es que se recibió del Doctorado la asignación de fondos para financiamiento de PID homologados y Centros y Grupos de Investigación. Recibimos para PID 2.467.000 pesos y para Centros y Grupos recibimos 250.000 pesos (65.000 para cada centro y 45.000 para cada grupo). Lo que nos permite afrontar los gastos de todos los proyectos de investigación y desarrollo, incluso con la posibilidad (porque esto formaba parte de una previsión) de tener también un fondo relacionado con el tema inflacionario, pensando sobre todo en la compra de equipamiento.
Y por último compartir con ustedes lo que fue la experiencia del viaje a Roma y la participación en el Congreso de Scholas. Para que se den una idea fueron dos jornadas de trabajo de todo el día, que fue parte del Seminario Scholas, con la presencia de 46 universidades de todo el mundo. Nosotros fuimos la única Universidad pública de la Argentina en participar, junto con otras cinco universidades privadas. Había algunas otras universidades públicas del resto del mundo, pero la mayoría eran privadas, con multiplicidad de credos. Era un encuentro que tiene mucho que ver con el ecumenismo, no solo eran universidades católicas, sino laicas, musulmanas, judías y católicas. Fueron dos jornadas de todo el día, con exposición de trabajos, y esto culminó con un compromiso de formar la cátedra Scholas, que significa un espacio, un compromiso de nuestra Facultad, pero también de nuestra Universidad (esto lo voy a trasladar a Consejo Superior), de apoyar y apadrinar escuelas cercanas, no geográficamente pero sí en la temática, proyectos concretos de aplicación en la sociedad que rodea esa escuela. Nosotros nos comprometimos a apadrinar cinco proyectos a lo largo de un año para que esos proyectos se puedan llevar a cabo y tengan un impacto social. Y además presentamos dos proyectos concretos, uno de un Ecodomo Sustentable, con la idea de generar material educativo para proyectar en domos construidos con materiales reciclables, con el objetivo de acercar a los chicos a la tecnología a partir de medios audiovisuales.
El otro proyecto es el de un aula sustentable, hecha con material reciclable, con un sistema mixto de generación de energía a partir de una turbina eólica combinada con un panel solar que permite ubicar esa aula en lugares que no tengan energía eléctrica. El aula está pensada para ser equipada con 10 puestos de trabajo, para entre 20 y 40 estudiantes con pizarra interactiva, con scanner e impresora 3d, en la búsqueda de acceder a poblaciones vulnerables, acercar la tecnología, formar a los chicos y que los chicos además produzcan. Hay un planteo que hace el Papa Francisco y que tiene que ver con la mente, el corazón y las manos; desarrollar la mente, el bienestar y generar trabajo. Lo que busca es que los chicos terminan desarrollando prototipos que ayuden a la comunidad local para que no dependan de las cosas que les llegan por centros comerciales. Que desarrollen herramientas que lo ayuden a resolver problemas en la población que los circunda.
Nosotros le hicimos llegar al Papa los dos proyectos, que fueron explicados en mi intervención en la academia Pontificia de las Artes (lo pueden ver en la página de Scholas y en la web de la UTN Buenos Aires). Además le hicimos llegar una caja que contiene una foto grupal de los chicos que ingresaron en este último período a la universidad y que provienen de barrios vulnerables de la Ciudad de Buenos Aires, a través del programa ENTROPÍA. Dentro de la caja le hicimos llegar esa foto y además cartas escritas por los chicos, y algunas por las madres de los chicos, por ejemplo, donde ellos cuentan la experiencia de haber participado del programa ENTROPÍA, que es un programa que venimos llevando adelante desde hace algunos años a través de Extensión Universitaria, coordinado por el Ingeniero Jorge Almiña, y que lo que busca es, también con un aula con tecnología, pero sobre todo con tutores, meter al chico a la realidad del ingreso a la universidad y favorecer ese trance que significa pasar el ciclo introductorio. El resultado de ese programa es tremendamente satisfactorio, de hecho en los últimos años estamos en el 100% de aprobación del introductorio, y además venimos monitoreando a los chicos cómo avanzan en la carrera. Algunos ya están en 4º o 5º año y ya son tutores del programa. De hecho está la anécdota de un chico que no quería acercarse al programa y reconoció como vecino de la villa 31 a uno de los tutores, y eso le dio confianza, y el chico terminó ingresando a la Universidad.
Esa historia yo la redacté en una carta personal que le dediqué al Papa Francisco para que le llegue y pueda interiorizarse de este proyecto que estamos llevando a cabo en la Facultad. Como decía fueron dos días, viernes y sábado y el domingo hubo un cierre donde concluimos el capítulo universitario, el capítulo juvenil (había muchos jóvenes de todo el mundo, inclusive de argentina) y un capítulo dedicado a artes, deportes y cultura, con algunos famosos, jugadores de fútbol. Ahí se decidió que el partido por la paz, que se iba a realizar ese mismo domingo, y se suspendió. Se va a hacer el domingo 10 de julio en la ciudad de La Plata. El Papa le entregó a autoridades de la provincia un olivo para que sea plantado en inmediaciones del estadio único de La Plata, donde se va a jugar el partido por la paz que tiene que ver con el festejo del bicentenario de la independencia nacional.
Más allá de esto, la experiencia fue impresionante, la posibilidad de expresarnos en ese ámbito y por las relaciones con el resto de los colegas de las distintas universidades, y además con la gente de la Pontificia Academia de las Ciencias, que tiene 35 premios nobeles. Y el discurso del Papa y la fortaleza de todo lo que trasunta un lugar como el Vaticano. En lo personal una experiencia impresionante y en lo colectivo creo que le hace muy bien a la Universidad participar de este tipo de iniciativas y de eventos. Muy contento por todo lo vivido.