“No nos quejamos de cómo vienen los alumnos del secundario, atendemos el problema”
Oscar Bruno, ganador del Premio CIIE a la Innovación Educativa, destacó la postura que asumió la UTNBA con la intención de mantener la excelencia académica que la caracteriza.
En los últimos años la Facultad viene haciendo un exhaustivo trabajo para mejorar la formación de sus estudiantes en tres planos: el acompañamiento de los aspirantes al momento de ingresar a la UTNBA, para lo que creó el programa Entropía; una vez que ingresaron, ayudarlos a transitar sus primeros años en la carrera, para lo que creó el programa de tutorías; y en tercer lugar promover la capacitación en innovación entre los docentes de nivel medio con el programa Modelando la Ciencia, pero fundamentalmente entre los profesores de la Facultad, para lo que creó el Centro de Innovación e Investigación en Educación (CIIE).
Como parte de esa política con la que la UTNBA busca garantizar la excelencia académica, este año se realizó el Premio CIIE con el que se reconoció a los docentes que vienen empleando una metodología innovadora en sus clases.
De los tres proyectos finalistas, el ganador fue el presentado por el Dr. Oscar Bruno, titular de la Cátedra de Algoritmos y Estructura de Datos que se dicta a alumnos de 1º año en la Facultad; los otros dos proyectos finalistas fueron los de Agustina Zangrando, Docente y Secretaria Administrativa del Departamento de Ing. Química; y Diego Berenguer, titular de la Cátedra Evaluación de Proyectos de Ingeniería Industrial.
El Dr. Bruno, que en la Cátedra que dirige implementó lo que denominó la teoría de las vocales, aseguró: “No nos quejamos de las debilidades que acarrean de las escuelas, sino que pensamos con ellos qué ingeniero vamos a formar, qué habilidades y competencias van a adquirir, más allá de las particularidades del contenido, al que también prestamos atención y lo acercamos completo”
La teoría de las vocales consiste en Acompañar al alumno, Escucharlo, Interpretarlo, Orientarlo, Utilizando todos los recursos que ofrece la tecnología: redes sociales, videos de youtube, entre otros.
“Mi proyecto es simple: la materia que dicto se da en primer año y en primer año los chicos no saben realmente nada de Ingeniería; entran con un poco de temor. Nosotros nos dedicamos a la programación y no todos los chicos conocen o estuvieron en contacto con la disciplina, por lo que nos tenemos que acercar a los chicos como si fuéramos sus maestros. Tenemos que acompañarlos con cierta inteligencia. Para eso empleamos la teoría de las vocales”, sostuvo Bruno.
En ese sentido, el titular de la Cátedra de la Cátedra de Algoritmos y Estructura de Datos explicó que da una charla durante el curso introductorio que reciben los alumnos previo al examen de ingreso, para conocerlos y que pierdan el miedo.
“A los chicos no los espero el primer día en el aula, los voy a buscar a ese módulo A del curso introductorio. El sentido que más usamos como docentes no es la palabra sino la escucha. Eso cambia la predisposición de chicos”, aseguró.
El proyecto presentado por la Ing. Agustina Zangrando se inició a raíz de la inquietud que comenzó a generarle que el Departamento de Ingeniería Química cuente con una planta piloto y un laboratorio tecnológico vinculado, y los alumnos casi no tuvieran posibilidad de manipular los equipos. En la clase previa se explicaba lo que había que hacer y cuando los alumnos iban al laboratorio escuchaban mientras el Jefe del Laboratorio manipulaba todas las instalaciones.
“Con la intención de que los estudiantes pudieran manipular los equipos, empezamos a pensar en este proyecto. Eso fue en 2012, y en 2013 lo pusimos en práctica. Desde entonces ha funcionado excelente. Se trata de un video en el que nosotros mismos, los docentes, manipulamos todo. Tiene una duración de 16 minutos y el alumno tiene que verlo, sin consigna previa, antes de ir al Laboratorio. Cuando van, son ellos los que tienen que manipular los equipos. La verdad es que la devolución de los chicos es fantástica. Ahora tienen que tocar, equivocarse, que es parte del proceso de aprendizaje”, explicó Zangrando.
Por otro lado, el proyecto del Ing. Diego Berenguer, profesor adjunto de la Cátedra de Evaluación de Proyectos de Ingeniería Industrial, explicó que en esa asignatura se trabaja actualmente con “un grupo de facebook que es el núcleo central de nuestra vinculación, permite una variedad de actividades como la mensajería instantánea, encuestas, vincular a las presentaciones que se van a utilizar las distintas clases, (los apuntes, notas y ejemplos de parciales, videos y archivos donde se explican algunos temas particulares desarrollados o no en clases, encuestas de retroalimentación durante el año, modificaciones de calendarios, actividades de la Facultad extra-cátedra y mucho más. También se usa como plataforma para que los alumnos y la cátedra puedan invitar a amigos y familiares a la Feria de Proyectos que hacemos cada año y que este año se hará el 24 y 27 de octubre”.
Esa Cátedra generó además, una página web similar a Wikipedia, que permite “que cada grupo pueda acceder de manera colaborativa a sus proyectos, lo que evita riesgos de pérdidas y versiones, le da uniformidad a la estructura, permite a los docentes realizar observaciones en la parte de discusión evitando el tiempo de ida y vuelta en las respuestas y ver la evolución de los trabajos y sus correcciones. Esto permite comparar el contenido fácilmente y ver quién ha trabajado o no”, sostuvo Berenguer.
En ese sentido, el Dr. Bruno consideró que los docentes se transforman para contener a los chicos, en “anfitriones de la educación. Somos anfitriones en la fiesta de la educación. Por lo cual estamos permanentemente en contacto con los alumnos”.
Para mantener esa cercanía con los estudiantes y poder cumplir con el dictado de todos los contenidos, Bruno explicó que emplean todas las herramientas que brinda la tecnología (redes sociales, videos, etc.). Se hacen videos con la explicación teórica de los temas para que en la clase se refuercen los conceptos clave o evacúen dudas: “la tecnología nos ayuda muchísimo. Priorizamos la competencia al contenido, es decir que si alguien sabe hacer alguna cosa, no importa si hubo algún contenido que se me escapó y no se lo pude dar. Porque si sabe hacer algo en programación, seguro que lo que se me escapó lo va a poder adquirir con mucha facilidad”, sostuvo.
El docente explicó que su proyecto no solo valora los saberes de cada uno sino que además propone la evaluación entre pares: “los estudiantes no solo tienen que responder lo que nosotros les preguntamos sino que ellos hacen preguntas para que respondan sus compañeros. Y los problemas que ellos plantean los tienen que resolver y corregir ellos mismos. Nosotros evaluamos la calidad y la propuesta del problema, la calidad de la forma como lo resolvieron”, explicó.
Bruno mencionó la necesidad de ofrecer una “educación flexible” a los alumnos y consideró que “el problema no está en los chicos sino en nosotros que nos tenemos que seguir formando. Hay que hacer lo que hace la UTN; el Centro de Investigación e Innovación en Educación es parte de eso, promover la capacitación permanente”.
El trabajo que realiza el Centro CIIE constituye una política de la UTNBA que tiene como fin último la excelencia académica. El Sistema Institucional de Tutorías (que acompaña al estudiante luego del ingreso); y la investigación cuanti y cualitativa del ingreso que realiza la Secretaría de Planeamiento y Gestión de Procesos de la Facultad resultan estrategias complementarias que se articulan con ese objetivo. A partir de ellas se gestaron los programas de extensionismo Entropía (tendiente a garantizar igualdad de oportunidades de ingreso a aspirantes de escuelas públicas) y Modelando la Ciencia, que propone la capacitación docentes de Matemática, Física y Tecnología sobre metodologías y procesos de enseñanza de Ciencias Básicas.