Pandemia y estrés: aumentaron las consultas en el gabinete psicológico de la Facultad
En su mayoría corresponden a alumnos pero también se incrementaron las consultas de docentes. La atención es gratuita para toda la comunidad tecnológica.
La UTNBA, a través de la Secretaría de Asuntos Universitarios (SAU) dispone de un área de salud y orientación vocacional y un gabinete de asesoría psicológica a cargo de la Licenciada en Psicología, Viviana Acosta.
La atención es gratuita tanto a alumnos, docentes y no docentes de la Facultad y para solicitar un turno se debe escribir a: vacosta@frba.utn.edu.ar
“Lo que observo es que se ha incrementado, aunque no sea muy significativo, la cantidad de consultas en comparativa con años anteriores a la pandemia y lo que me llamó la atención es la novedad de las consultas de docentes, que se suman a las de los alumnos. Por lo general se acercaba el alumno por recomendación del docente, pero ahora son éstos últimos quienes se acercan para comentar sobre situaciones en el aula”, expresó la Lic. Acosta.
La Licenciada se refiere a un aumento de consultas de los docentes respecto a las conductas de sus alumnos en las clases; “los profesores sienten la falta de contención que quizá te da un aula y se sienten solos y observan estos cambios de conducta y hacen la consulta porque no es fácil manejar una clase virtual”, sostuvo Acosta y agregó “ la universidad permite tener un marco con reglas que debemos cumplir y cuando ese marco se rompe, todo se modifica y debemos acomodarnos a un nuevo contexto, lo que nos genera un término conocido que es el estrés”.
Acosta añadió respecto al estrés causado por la pandemia en el ámbito educativo: “el perfil del ingeniero es muy particular respecto a otras carreras. Sin generalizar, se los puede describir como estructurados y metódicos. Tienen una rutina interrumpida ante este contexto y al romperla se genera mucho estrés. Frente a esto deberán readaptarse y sabemos que el después no será sencillo. La nueva normalidad deberá ser de a poco, porque todo cambio o crisis necesita un proceso de elaboración y tendrá que haber un tiempo de pausa”.
Respecto a las patologías más recurrentes asociadas con el actual contexto de pandemia por COVID-19, “la cuarentena se va a asociar con el distrés psicológico”, sostuvo la Lic. Acosta mientras explicó que esto tiene que ver con el estrés representado en un cansancio generalizado tanto mental como físico de la persona. Ante esta situación hay dos posibles reacciones del sujeto, sea resistiendo o adaptándose, según explica la licenciada:
“Si hablamos de resistencia nos referimos al estrés negativo, que resulta en el concepto de distrés psicológico. Y si la persona tiene los recursos para adaptarse a esta situación, lo llamamos estrés positivo. Cuando se genera la reacción de resistencia provoca agotamiento y desequilibrio en la persona y se puede observar síntomas cognitivos que tienen que ver con el alumno que presenta pérdida de memoria o de no poder retener los conocimientos, sumado a la falta de concentración; pensamientos que provocan preocupación y ven todo negativo.
“A pesar de tener tiempo – continuó- no lo pueden aprovechar y les produce frustración. Luego podemos nombrar los síntomas emocionales que tienen que ver con el cambio de humor, la irritabilidad, casos de depresión, aislamiento y la sensación de soledad. Y síntomas conductuales: los profesores sienten la falta de contención que quizá te da un aula. Y hay manifestaciones de otros síntomas que tienen que ver con lo físico que lo produce el estrés negativo. Se manifiestan a través de dolor de cabeza, mareo, náuseas, dolor de pecho, entre otras”.
Además, según sostiene Acosta, “la ansiedad y el miedo son emociones esperables en esta situación, y a pesar de que generan malestar son emociones que ayudan a poner en marcha acciones o mecanismos que puedan llevar el estrés negativo al positivo”.
Sumado al miedo y la ansiedad, el insomnio es un síntoma característico de estos tiempos, según sostiene la licenciada y tiene que ver con “la preocupación y el ámbito de lo económico y lo laboral. Hay variables que se juntan, además de la falta de horarios y de rutina. Uno está desorganizado. Lo necesario es un funcionamiento adaptativo y volver a crear la rutina”, sostuvo Acosta y agregó:
“El contexto en el que nos encontramos es una total alteración de la rutina social, laboral y familiar, en la que se han impuesto las clases virtuales, por ejemplo, en el sector educativo. La ausencia de contacto físico con amigos y familiares, el temor al contagio, la preocupación quizá por no poder cuidar a las personas próximas más vulnerables, la angustia por lo económico, duelos no resueltos, la incertidumbre de cuándo terminará, provoca mayor esfuerzo y distorsiones psicológicas. Estados emocionales que tienen que ver con la tristeza, cansancio, irritabilidad, insomnio, es lo que más se manifiesta en las demandas de consultas”.
La lic. Acosta recomendó buscar un lugar para distenderse, en el que la persona se sienta cómoda: un balcón, la plaza o actividades como caminar o leer, “con el propósito de buscar afuera una contención y poder expresar en palabras lo que nos está pasando, por más frustrante que sea la situación que atravesamos. Desde la psicología, poder expresarnos nos ayuda a relajarnos y conocernos mejor y, a partir de ese conocimiento, tener herramientas para enfrentarnos y reaccionar y ser más asertivos ante determinadas situaciones. En algún punto, la salud mental en el contexto de pandemia por covid, depende de la capacidad de cada uno para expresar las emociones y mantener el contacto social”.
Todo tiene que ver con la actitud, señaló Acosta, ya que “cada día tenemos la oportunidad de elegir la actitud con la que queremos enfrentar la situación actual y cada cual tiene sus propias herramientas singulares”.
El gabinete de consultoría psicológica de la Facultad está trabajando de forma virtual y el modo de contactarse es a través del correo electrónico de la Lic. Viviana Acosta. Es gratuito y está disponible, al servicio de toda la comunidad tecnológica: “es importante remarcar que hay un espacio en la Facultad que ya existía y que continúa en este contexto; lo cual resulta sumamente oportuno”, concluyó la Lic. Acosta.