“Argentina es uno de los países con más alto índice de uso de papel reciclado”

El graduado Ing. Fabián Delorenzi forma parte del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) desde hace 31 años. Realizó toda su carrera en la UTN Buenos Aires trabajando como técnico en el Laboratorio Químico del Centro de Celulosa y Papel de ese Instituto, y actualmente es Responsable del Laboratorio Químico y de Procesos.

Entre 2009 y 2015 participó de la redacción de un nuevo reglamento para envases de papel y cartón del Mercosur,  que permite que los productos que se exporten desde el Mercosur hacia la Unión Europea o Estados Unidos, cumplan con los requisitos exigidos por esos destinos comerciales.

Delorenzi dialogó con el programa radial de la UTNBA, “Buenos Aires Tecnológica” sobre la seguridad de los envases de papel y cartón, su recorrido profesional, su paso por la UTNBA como alumno y qué lo llevó a dar clases en la Facultad.

¿Cuáles son sus principales actividades en el INTI?

Soy Responsable de los Laboratorios Químico y de Planta Piloto de INTI- Celulosa y Papel, en donde básicamente hacemos investigación y desarrollo de nuevos productos. Por un lado brindamos servicios y asesoramiento a la industria; y por otro, diversas actividades como la fabricación de pasta celulosa en la planta piloto. Allí tenemos la posibilidad de analizar todos los estadíos en la fabricación de papel, desde las materias primas, pudiendo realizar tanto pasta celulósica como papel. Todo recurso fibroso puede ser apto para fabricar papel.

¿Son seguros los envases de alimentos que se emplean en Argentina?

Los envases de alimentos son seguros porque se realizan controles desde los organismos de certificación. Es decir que un envase de cartón o papel, para estar en contacto con un alimento, sí o sí tiene que estar certificado. Si no, no puede estar en el mercado formal. En el mercado informal a veces no se hacen los controles. Pero en el mercado formal todo el mundo sabe que se hacen controles muy frecuentemente.

¿Cómo se realizan esos controles?

El organismo que se encarga de certificar es el que tiene que pedir los análisis. Nosotros le pedimos al fabricante una declaración de los aditivos que puede llegar a tener el papel. Porque si el papel es no reciclado, es decir, que se realiza a partir de fibras del recurso fibroso (denominadas vírgenes), no posee contaminantes, ya que la celulosa que es el único polímero es inocua. Pero puede tener aditivos potencialmente tóxicos, por lo que es necesario tener una declaración jurada del fabricante. Una vez que se tiene esa declaración jurada se efectúan los controles correspondientes. Al mismo tiempo, se controla siempre la totalidad de lo que puede llegar a migrar a los alimentos teniendo en cuenta el tipo de alimento, la temperatura y el tiempo de contacto. La reglamentación establece cuánto puede migrar, cuánto puede haber de metales pesados, de compuestos potencialmente cancerígenos, entre otros.

¿Qué tipo de envases de alimentos son riesgosos?

Cuando uno compra una pizza, a la caja de pizza normalmente no se le realiza ningún control. Es un mercado bastante informal y se corre riesgo que ante un contacto de varias horas pueda ocurrir una migración de componentes tóxicos. Yo lo que le recomiendo a la gente es que cuando les entreguen la pizza, no coloquen la pizza que les sobra así como está en la heladera y la dejen toda la noche porque se corre riesgo de que puedan migrar al alimento sustancias tóxicas que no han sido controladas. Hay que tener cuidado, evitar el contacto prolongado.

¿El papel reciclado puede tener elementos contaminantes?

Parece una paradoja pero un papel reciclado puede tener elementos contaminantes. El papel que se recicla es justamente papel que ya ha sido impreso, además puede haber plásticos, arena, etc. fruto de una selección incorrecta. La tinta tiene componentes tóxicos adicionales a los que tiene un papel de uso tradicional. Los materiales plásticos que pueden venir con el reciclado tienen un problema, ya sea los envases plásticos como en estos plásticos que pueden venir con los papeles reciclados, son los polímeros que aporta y que pueden ser potencialmente tóxicos. También tiene monómeros de esos polímeros que pueden aportar toxicidad. Entonces, además de los análisis que se hacen normalmente para detectar en los papeles algún aditivo tóxico, es necesario hacer una serie de análisis adicionales para verificar si los componentes tóxicos de las tintas y los plásticos pueden llegar a migrar a algún alimento.

¿Es más seguro el cartón que el plástico?

Los envases de cartón o de papel pueden ser más seguros que los envases de plástico aunque éstos sean biodegradables. El material celulósico tiene grandes ventajas sobre el material plástico: es renovable, reciclable y además es mucho más biodegradable que el plástico porque se habla de plástico biodegradable pero es un material mucho más difícil de degradar. Las variedades del plástico que se pueden biodegradar son pocas y tardan muchísimo más tiempo que el papel. El papel es mucho más natural en su proceso de biodegradabilidad.

El plástico no solo presenta más componentes que pueden llegar a ser tóxicos, debido a que está compuesto por numerosos polímeros,  sino que además es menos biodegradable y es difícilmente reciclable. En ese sentido, de todos los papeles que se usan en el país, aproximadamente el 55 por ciento se realizan a partir de papel reciclado. Es uno de los índices más altos del mundo.

¿Qué recaudos hay que tener en cuenta al momento de emplear un envase de papel o cartón?

Cuando se utiliza un papel reciclado para contacto con alimentos hay que tener en cuenta una serie de buenas prácticas de fabricación sobre las que estamos asesorando a las empresas. Porque no es lo mismo un papel reciclado que ha sido debidamente seleccionado en su calidad para ser reutilizado en contacto con alimentos que utilizar como materia prima un reciclado de baja calidad con muchos tóxicos en su composición.

¿Cómo fue participar de la redacción del nuevo reglamento del Mercosur para envases de papel y cartón?

Se hizo toda la reglamentación nueva y eso hace que cuando se va a exportar un producto envasado en papel o cartón, pueda ser aprobado tanto en la Unión europea como en Estados Unidos.

Se hicieron reuniones en todos los países del Mercosur, pudimos realizar un intercambio que fue muy fluido y pudimos saber toda la problemática que existía en todos los países del bloque y también tuvimos la participación de la industria. Varios industriales participaron en estas reuniones y pudieron aportar todas sus problemáticas. Y con los países del Mercosur pudimos aunar criterios; si bien tuvimos disidencias, terminamos en un acuerdo que nos benefició a todos.

Por cada país participaban entre 2 y 4 personas. Las tareas se iniciaron en el año 2009 y se extendió hasta 2015. Este nuevo reglamento unificó todas las resoluciones Mercosur que se iban incorporando al reglamento de cada país e incorporó las nuevas recomendaciones alemanas y de la FDA de Estados Unidos que son referencia a nivel mundial.

Una de las cosas que pudimos obtener como algo relevante fue la posibilidad de utilizar papel reciclado en contacto con alimentos acuosos grasos, como el ejemplo de las pizzas. Para poder utilizar un papel reciclado para ese tipo de alimentos hay que hacer una serie de controles adicionales que ya tienen la metodología fijada.

¿Todos los países del Mercosur pueden realizar ese tipo de controles?

No todos los países del Mercosur están preparados para hacerlos, lo que tratamos fue de aunar metodologías. Hay ciertos países que no tenían la tecnología necesaria, pero el INTI se encuentra debidamente equipado y pusimos a punto todas las técnicas como para poder analizar de manera correcta y los envases que estén en contacto con los alimentos sean seguros.

¿Cómo llegó a la UTNBA?

Ingresé a la Facultad en 1985. En el secundario me recibí de técnico químico en la ENET nº 27, y con mis compañeros decidimos en grupo ir a la tecnológica. No sabía bien con qué me iba a encontrar y realmente tuve una sorpresa muy agradable porque superó todas mis expectativas. Los docentes siempre fueron excelentes y lo que más nos gusta a todos los que hemos estudiado en la UTN es el ambiente. El ambiente tanto de los alumnos, que se fue manteniendo en el tiempo, como en la relación de los docentes con los alumnos.

¿Cómo inició su carrera docente?

En 1994 me recibí de ingeniero químico. Me gustaba la docencia, lo hacía de manera informal. Los excelentes docentes que tuve fueron mi inspiración. Empecé primero como ayudante de cátedra y ahora soy profesor en una materia de cuarto nivel.

¿Cuándo comenzó a investigar?

La carrera la hice siempre trabajando en el INTI, en donde estoy hace 31 años. Entré al Instituto por recomendación de un compañero mío de la Secundaria, me recomendaron a mí y entré a trabajar hace ya 31 años como técnico químico en el Laboratorio del que ahora estoy a cargo.

Empecé a tomar contacto con la investigación desde que entré a trabajar al INTI. Allí empecé bien de abajo y fui aprendiendo toda la metodología de la investigación. Hace ya una buena cantidad de años que estamos investigando para desarrollar nuevos productos, mejorar productos y dar valor agregado a las materias primas.