Comunicación inclusiva y sin interferencias en la UTN Buenos Aires
Tres recintos de la UTN BA están equipados con aros magnéticos para que las personas hipoacúsicas puedan escuchar con claridad los eventos que se llevan a cabo.
Con el objetivo de hacer accesible la educación para las personas con discapacidades, la UTN Buenos Aires implementó, en los últimos años, diversas políticas para hacer de este ámbito educativo un lugar inclusivo e igualitario para todos. Una de las acciones llevadas a cabo consistió en la instalación de aros magnéticos. Se trata de un dispositivo electrónico gracias al cual las personas hipoacúsicas, que padecen una disminución auditiva, pueden escuchar sin interferencias lo que sucede dentro de un recinto.
El sistema de aro magnético fue instalado en el aula 37 de la Sede Campus, en el Auditorio y en el Aula Magna de la Sede Medrano. El primero fue donado por la Mutual Argentina de Hipoacusia y los dos últimos fueron fabricados e instalados por Maná Desarrollos, una empresa dedicada al desarrollo de tecnologías para personas con discapacidad, formada inicialmente en 2006 por los ingenieros electrónicos de UTN.BA Martín Belzunce y Nahuel González.
Actualmente, en la empresa trabajan el Ing. González (34), docente de la Casa, el Ing. Electrónico Alejandro Breitman (27) y Sebastián Frydman (26), estudiante avanzado de la carrera.
El Ing. Nahuel González relata que la empresa está en permanente contacto con la gente de ORADIS, el área de Orientación y Apoyo para personas con Discapacidad dependiente de la Secretaría de Asuntos Estudiantiles, para conocer cuáles son las necesidades que presenta la Facultad a nivel tecnológico y así brindarle su asesoramiento y colaboración.
“A raíz de este contacto, –señala el Ing. González-, ORADIS nos solicitó un presupuesto para fabricar e instalar sistemas de aros magnéticos en el Aula Magna y en el Auditorio. Nosotros elaboramos un precio diferencial para la Facultad”.
El Ing. Alejandro Breitman explica el alcance del aro magnético: “Es un sistema de audio, similar a un amplificador cuya función es irradiar una entrada de audio genérica que puede ser un micrófono, un equipo de música, un televisor, un celular y luego se envía esa señal. La persona hipoacúsica no tiene que adquirir, ni comprar nada distinto a lo que usa habitualmente para acceder a este beneficio. Si el recinto está preparado con este sistema, solo tiene que poner el auricular que utiliza en Modo T de la bobina telefónica. De esta manera, lo que hará es captar la señal conectada a la salida del aro magnético, que es un cable que se coloca en el recinto. Así, el audífono filtra el ruido ambiente y amplifica esa señal que se está irradiando. Si alguien tose o corre una silla no lo va escuchar, lo que sí escuchará es la fuente puntual, que puede ser es una consola, un equipo de música o una película”.
La instalación del aro magnético se realiza por única vez, es accesible y modifica para siempre la experiencia de las personas que padecen una disminución auditiva. Dependiendo de la forma en que se instale el sistema de aro magnético se determina el alcance de la cobertura de un espacio. Al respecto, Sebastián Frydman detalla: “Con este sistema se puede cubrir un sector específico o bien desarrollar un trazado mayor y cubrir todo el perímetro del recinto. Puntualmente, lo que se logró en los dos ámbitos de la Facultad es una cobertura total, tanto del Aula Magna como del Auditorio. Los dos espacios son accesibles 100% para personas hipoacúsicas. No solo lo son para los eventos de las colaciones que allí se llevan a cabo, sino también para los diferentes eventos culturales que ofrece la Facultad, como por ejemplo la presentación de bandas sinfónicas”.
Es importante destacar que los espacios equipados con el sistema de aro magnético deben ser obligatoriamente señalizados para garantizar la inclusión social.
Los integrantes de Maná Desarrollos coinciden en que el desafío del sistema no está dado en el equipo en sí mismo, sino en el trazado, en el modo en que se instala puesto que no tienen las mismas características un espacio circular, cuadrado o rectangular. Todo depende del formato del lugar y también del tamaño del mismo. Para dar un ejemplo, señalan que en La Nave de la Ciencia, un auditorio en Tecnópolis con capacidad para 1500 personas, instalaron tres equipos de aros magnéticos.
Asimismo, los profesionales aseguran que para garantizar la efectividad del sistema del aro magnético -previo a su instalación- se requiere hacer un relevamiento de las diferentes fuentes que puedan causar interferencia. Eso se realiza a través de un barrido con un audífono que permite detectar eventuales ruidos.
Sebastián Frydman indica que “nosotros probamos que haya homogeneidad en el espacio donde colocamos un aro magnético, es decir que se escuche con la misma calidad en todos los lugares del recinto”. Y agrega: “Esta herramienta la hemos desarrollado con el afán de atender las diferentes discapacidades y mejorar la calidad de vida de las personas. Así descubrimos que no hay empresas en Argentina que se dedican a desarrollar productos para satisfacer esta carencia”.
El Ing. Nahuel González complementa que, como empresa, Maná Desarrollos es la única que diseña, fabrica y brinda capacitación de desarrollos tecnológicos con impacto social en nuestro país. “No solo trabajamos desde el lado ingenieril, sino que trabajamos con una filosofía llamada DCU (Diseño Centrado en el Usuario) que consiste en poner en el centro de la escena al usuario atendiendo sus necesidades y las del contexto en el cual está inserto. Además, nos nutrimos de un equipo interdisciplinario integrado por una fonoaudióloga y una terapista ocupacional”.
El Ing. Alejandro Breitman resalta que hay que entender que “la tecnología es una herramienta que puede ser utilizada para mejorar la calidad de vida de las personas siendo un medio valioso para hacer accesible e inclusivo un espacio”.
Para mayor información sobre el trabajo que realiza ORADIS, hacer click aquí